Patente de invención: Deshidratador de solventes

En el año 2005 vivíamos el boom de la producción de los biocombustibles y comenzamos a trabajar, inicialmente, con el propósito de elevar la concentración del alcohol, la que, con los estándares normales de producción fermentativa, alcanza teóricamente un nivel de concentración del 14% y que máximo se podría llevar a un 70% de pureza con el uso de métodos simples. Así empieza esta historia del deshidratador de solventes Margarita Enid Ramírez Carmona, Ingeniera Química, egresada de la UPB y Doctora en Tecnología de procesos químicos y bioquímicos de la Universidad Federal de Rio de Janeiro.

La experta, una mujer descomplicada, arrasadora, espontánea y que llama las cosas por su nombre, sigue su relato:

Pensemos en el Chocó, pide Ramírez Carmona, zona del país con fuertes carencias, especialmente en materia de vías. Para sus habitantes la principal forma de movilizarse es la lancha (transporte fluvial). Estas personas lograrían elaborar combustibles a partir del alcohol que actualmente producen de manera rudimentaria mediante alambiques y potenciar su eficiencia hasta obtener un alcohol carburante.

El deshidratador de solventes utilizado para mejorar la movilidad es una solución concreta a una necesidad real, recalca la experta. Más económica, amigable con el medio ambiente y el equipo es tan manejable que se arma y desarma como un Lego y es fácil transportar a cualquier zona del país.