Agencia de Noticias UPB - Medellín. El mundo necesita de maestros que lleven las ideas más extraordinarias y disruptivas a las aulas de clase, pues solo así se estará formando a los pequeños ciudadanos y futuros profesionales en medio de ideas que, aunque parezcan inalcanzables, no son imposibles. Jhon Alexander Echeverri es uno de ellos.
Jhon ha destinado su vida al servicio de la comunidad por medio de proyectos innovadores que buscan una solución a problemáticas ambientales y sociales, gracias a esto ha obtenido distintos reconocimientos por su labor. En el 2018 fue nominado por el Global Teacher Prize como uno de los 50 mejores profesores del mundo y ha obtenido por nueve años consecutivos el Premio Nacional al Inventor Colombiano.
Jhon Alexander nació en Envigado, Antioquia, es licenciado en ciencias naturales de la Universidad de Antioquia y magíster en educación en la Universidad Pontificia Bolivariana, actualmente es maestro en tres instituciones educativas de Envigado, en las que Jhon Alexander ha impactado la enseñanza y el aprendizaje a través de proyectos que se desarrollan en conjunto con sus alumnos, logrando llevar la teoría a la práctica.
“Hemos generado diferentes herramientas didácticas y pedagógicas para que estudiantes y docentes puedan aprender a través de la realización de proyectos basados en sus gustos y necesidades, esto ha permitido crear inventos e implementar estrategias que mejoren la convivencia, desarrollen capacidades científicas y valores socioemocionales para formar estudiantes íntegros y socialmente responsables con su comunidad”, explicó el maestro.
Su curiosidad e inquietud por investigar y hacer realidad aquellas ideas que surgen en su cabeza, que pueden parecer un poco locas y salirse del molde de una educación tradicional, se las atribuye a su padre, quien a todo problema del hogar le encontraba una solución. “Mi padre ha sido muy creativo e ingenioso cuando se trata de reparar algo en el hogar, de él aprendí ese poder inventivo al crear y desarrollar mis proyectos”, afirmó Jhon Alexander.
Al interesarse por la investigación priorizó el encontrar una solución a las problemáticas de la comunidad, especialmente en cuestiones ambientales a raíz de la epidemia del dengue en el 2014 que les arrebató la vida a dos estudiantes. Este acontecimiento marcó su vida y decidió hacer algo desde su rol como docente por cambiar el rumbo de las situaciones que ponían en peligro a la sociedad.
A partir de allí se desprenden diversos proyectos que van desde la preservación del ecosistema hasta el uso de programación y robótica para la creación de prótesis para personas paralíticas y víctimas de la guerra.
De no ser por su madre que le ha fomentado valores y virtudes en su crianza, no sería aquel reconocido maestro de Envigado que hace de las aulas de clase una experiencia transformadora que les brinda herramientas no solo académicas sino para construirse primeramente como seres humanos.
Es por ello que le apasiona enseñar y su vocación es ser maestro, porque es una manera de instruir y formar estudiantes íntegros que puedan ayudar a la comunidad a través de proyectos, esta es la huella que Alexander le dejará a la sociedad al compartirle sus conocimientos a las nuevas generaciones.
Un futuro esperanzador para la humanidad es el que refleja Jhon Alexander en sus ideales y manera de educar, la educación transformó su vida a tal punto que él también decidió transformar la vida de sus estudiantes y de la comunidad.
Por: Daniela Jaramillo Zurita - Agencia de Noticias UPB
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