Retornar a los libros físicos: una mirada a la reactivación del préstamo de material impreso en las Bibliotecas UPB

Disponible en:Medellín19 oct. 2020

Agencia de Noticias UPB – Medellín. Desde el 31 de agosto se reactivó el préstamo y devolución de material físico en dos Bibliotecas de la UPB: Central y Ciencias de la Salud. La habilitación de estos servicios ha contribuido a que docentes, estudiantes, entre otros usuarios, fortalezcan de nuevo sus procesos de formación a través del acceso a fuentes que no pudieron ser consultadas por más de cinco meses, a causa de los periodos de cuarentena estipulados ante la pandemia.

 
Préstamo Bibliotecas UPB

 

Durante el tiempo de inactividad presencial, el Sistema de Bibliotecas UPB fortaleció y amplió su oferta de servicios digitales. Herramientas como bases de datos, libros y revistas digitales, repositorio institucional, entre otras, suplieron muchas de las necesidades de los usuarios en torno al acceso a la información requerida para sus labores académicas; sin embargo, la implementación de estos medios como única fuente de conocimiento bibliográfico también llevaron a la reflexión sobre el valor de los servicios que se prestan en las Bibliotecas de manera presencial.

Más que concluir qué servicios de Bibliotecas son más útiles, los físicos o digitales, este periodo de contingencia permitió identificar la importancia de tener a disposición diversos recursos para la consulta de información, pues ambos enriquecen con sus contenidos que, en muchas ocasiones, son creados específicamente para un solo medio. María Alejandra Blanco, estudiante de comunicación social de la UPB, resalta que cada formato tiene sus ventajas. Para ella, los libros digitales fueron un ‘salvavidas’, pero por gustos, volver al material físico siempre será más satisfactorio.

Siento que con el libro físico tengo más pertenencia, lo puedo llevar a todos lados, me motiva más a leerlo. Tuve la experiencia de volver a los libros de la Biblioteca Central a través del servicio de préstamo a domicilio, los protocolos de bioseguridad fueron adecuados, en general, la Universidad ha hecho un buen trabajo para mantenernos protegidos del virus”, comenta María Alejandra.

Para los docentes, la reactivación de estos servicios físicos también ha sido beneficiosa debido a que han retomado bibliografías que no se encontraban en lo digital y que son necesarias para el desarrollo de sus cursos, además, han vuelto a consultar documentos de apoyo para sus investigaciones. “Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde”, frase popular que no pierde vigencia y que sirve para ilustrar el vacío que dejaron las Bibliotecas para la formación académica durante la contingencia.

“Todos nos desconectamos de los libros físicos, eso nos hizo consultar internet y bases de datos, sin embargo, nada reemplaza el material que podemos encontrar en las Bibliotecas, eso corrobora también el ejercicio que se presta en este lugar como sacar los libros de los estantes, exhibirlos y mostrar las nuevas adquisiciones”, asegura Julián Monsalve Correa, docente de la Facultad de Arquitectura y Diseño UPB.

Hasta la fecha, un mes y medio después de haber habilitado el préstamo de impresos nuevamente, las Bibliotecas UPB Central y Ciencias de la Salud han realizado 162 préstamos y 408 devoluciones de material físico. La devolución de libros ha sido mayor, ya que muchos de los libros prestados antes de las restricciones han tenido la posibilidad también de regresar a sus estantes con esta nueva modalidad de servicio.

Si bien los resultados se reflejan en el préstamo o devolución de un libro, detrás de estas cifras está el equipo humano del Sistema de Bibliotecas UPB que hace posible acceder al material. Hasta el momento, la demanda de solicitudes por parte de los usuarios ha sido alta, esto ha significado un gran compromiso por parte del personal para el cumplimiento de los protocolos implementados para prevenir el contagio del virus. Aún con estas condiciones, la alegría de servir permanece siempre.

“El teletrabajo se hace muy cómodo, en el sentido que no hay que movilizarse para ninguna parte, pero volver a la Biblioteca es muy grato, porque la atención a los usuarios y el contacto humano no es el mismo a través de las pantallas. Venimos trabajando con todos los protocolos: el distanciamiento, uso de las mascarillas, uso de gel antibacterial y alcohol, además, los libros que se reciben se dejan en cuarentena por unos días antes de llegar al estante”, expresa Luis Salazar, líder del área de Circulación y Préstamo de la Biblioteca Central UPB.

Por ahora, las Bibliotecas UPB no abren sus puertas para el uso de sus espacios físicos, es decir, todavía no se puede ingresar a los espacios para realizar trabajos, consultas, entre otras actividades académicas. El préstamo y devolución de material físico que se habilitó funciona por medio de una solicitud previa del usuario a través de un formulario en línea, y para facilitar el proceso la entrega se hace a domicilio o presencialmente en una de las porterías del Campus. Este es el primer paso de lo que supone una reapertura gradual de los servicios de Bibliotecas, espacios necesarios y extrañados por los usuarios como complemento a su formación.

Conoce más sobre el préstamo de libros físicos en las Bibliotecas UPB

Por Sebastián Torres Mejía. Agencia de Noticias UPB.

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